jueves, 17 de octubre de 2013
jueves, 10 de octubre de 2013
LOS DETRACTORES DE LA SERIE ISABEL
Creo que la figura histórica de Isabel de Castilla es la misma que la
de otros monarcas de su época en Europa. Eran reyes crueles y
absolutistas ávidos de poder, que manejaron a su sociedad y a sus minorías,
en uno y otros sentidos, para sus propios intereses. La serie no es una
serie mala en su conjunto. Es verdad que es un poco “panfletera”y
recalca algo de los ideales de la derecha tradicional. Todos sabemos que
en la dictadura, junto al Cid, Catalina de Aragón y Santa Teresa de
Jesús; esta reina fue idealizada para justificar los preceptos del
régimen. Esto no es culpa de estos personajes de la historia. No se
pueden levantar de las tumbas para decir: ¡Eh, qué estáis haciendo con
mi persona! Aunque seguramente alguno estaría de acuerdo con lo que se
hace con ella. Tiene una fórmula con un guion muy de serie británica de
la BBC; supongo para hacerla más atrayente y así ganarse más audiencia y
con ello, ha producido un protagonismo sobre sus personajes principales
un poco a lo “John Wayne”. Pienso que es una buena serie a pesar de los
pesares. Históricamente está muy bien documentada y tiene un elenco de
actores muy notables; además de muchos medios. Sé que les han salido
detractores que comentan lo ya suscitado: lo subjetivo en los ideales
conservadores, el trato del pueblo judío, la imposición de la
inquisición y ese tipo de temas. De todas formas estoy un poco harto de
la perpetua leyenda negra que siempre persigue a los españoles y sobre
todo a los castellanos. Mientras el mundo anglosajón se jacta de sus
figuras históricas constantemente con un orgullo impertinente y a todos
nos parece de fábula; siendo estas, al menos, igual de perversas que las
nuestras; a nosotros nos parece muy mal que podamos hacer series de
televisión calcadas con ese mismo patrón. Tenemos que quitarnos un poco
la espinita histórica del siempre malvado y oscuro español, siempre
visto desde la perspectiva de la triunfadora y dominante civilización
anglosajona, y poder contar la historia bajo nuestro subjetivo punto de
vista igual que lo hacen ellos sin cortarse en absoluto.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)